Laboratorio Técnico y de Investigación

El corazón operativo del experimento AION.

Aquí los Charlies son sometidos a pruebas avanzadas, controles de fiabilidad y experimentación continua.

Es el lugar donde la tecnología se encuentra con la investigación ética, para garantizar soluciones cada vez más seguras, de alto rendimiento y transparentes.

Diseño y planificación

Cada Charlie nace de un minucioso proceso de diseño, que combina análisis técnico y evaluación ética. Esta fase define:

  • los objetivos funcionales (asistente, comercial, técnico, informativo),
  • los parámetros de fiabilidad requeridos,
  • la cadena de formación en función del sector de uso.

La planificación permite transformar una idea en una solución concreta, trazable y verificable, lista para pasar a las etapas posteriores de personalización y pruebas.

Insertar una cadena de indicaciones para el rol asignado

La esencia de cada Charlie es la cadena de instrucciones: una secuencia estructurada de instrucciones que guía el comportamiento de la IA. Aquí se definen las siguientes:

  • las reglas del lenguaje, para garantizar la coherencia comunicativa,
  • los límites operativos, con lo que puede y no puede hacer,
  • procedimientos de escalada hacia el operador humano cuando sea necesario,
  • los principios éticos del Código AION, integrados directamente en la lógica de respuesta.

Gracias a esta cadena, cada Charlie asume su propia identidad operativa y se convierte en un asistente capaz de actuar con precisión y responsabilidad en el contexto que se le confía.

Pruebas, ensayos y correcciones

Cada Charlie se somete a rigurosas pruebas e inspecciones, esenciales para garantizar la calidad y la fiabilidad. Durante esta fase:

  • Se simulan escenarios reales con preguntas y solicitudes complejas,
  • Se verifica la corrección de las respuestas respecto a los objetivos y principios éticos,
  • Se identifican los errores o ambigüedades y se realizan correcciones específicas.
  • Se mide la consistencia de la experiencia del usuario en diferentes contextos.

Este proceso cíclico garantiza que cada Charlie no sólo funcione, sino que también esté preparado para manejar con confianza la realidad operativa del cliente.

Formación especializada

Tras la fase de prueba, los Charlies participan en un programa de formación específico, adaptado a la industria y a las necesidades específicas del cliente. Este programa incluye:

  • bases de datos dedicadas (manuales técnicos, documentos legales, procedimientos internos),
  • Terminología de la industria, para garantizar la precisión y la competencia,
  • escenarios operativos complejos, para refinar la capacidad de gestionar solicitudes no estándar,
  • personalizaciones lingüísticas, que permiten que cada Charlie refleje el tono y el estilo de la organización que representa.

Esta formación hace que cada Charlie no sólo sea funcional, sino también reconocible y único, perfectamente alineado con el contexto en el que será utilizado.

Personalización del chatbot

Cada Charlie está diseñado para reflejar la identidad del cliente. La personalización incluye:

  • interfaz gráfica (colores, logotipos, iconos, posición en el sitio),
  • mensajes iniciales y preguntas sugeridas, diseñadas para dar la bienvenida al usuario y guiarlo,
  • funciones dedicadas (preguntas frecuentes, formularios de contacto, chat en vivo, integraciones con CRM o plataformas externas),
  • Tono de voz y estilo de comunicación, acorde con la imagen corporativa y los valores de la marca.

Esta fase permite a Charlie transformarse de un simple asistente digital a un auténtico embajador de la marca, capaz de transmitir confianza y profesionalidad desde el primer contacto.

Instalación en los vehículos del cliente

Una vez completada la personalización, Charlie se integra en las herramientas del cliente para que esté completamente operativo. Las opciones de instalación incluyen:

  • sitios web corporativos (a través de script o iframe),
  • comercio electrónico y portales (WordPress, Shopify, soluciones a medida),
  • canales sociales y de mensajería (WhatsApp, Facebook Messenger, Instagram Direct),
  • sistemas internos como CRM y sistemas de gestión.

Cada instalación se somete a pruebas de verificación para garantizar la compatibilidad, el uso fluido y el pleno cumplimiento de las normas de seguridad y privacidad. De esta manera, Charlie se integra a la perfección en el ecosistema digital del cliente.

Inicio de sesión del cliente para control y estadísticas

Cada cliente dispone de un panel de control privado, protegido con contraseña, desde el que puede:

  • comprobar en tiempo real las conversaciones entre Charlie y los usuarios,
  • consultar estadísticas de uso (número de conversaciones, tiempos de respuesta, frecuencia de solicitudes),
  • gestionar los formularios de contacto recibidos,
  • Monitorear el rendimiento y la eficacia general del chatbot.

Esta autonomía permite al cliente tener total transparencia y evaluar directamente los beneficios generados por Charlie, manteniendo la seguridad del sistema bajo la supervisión de AION.

Supervisión ética y actualizaciones continuas

El proceso no termina con la instalación: cada Charlie se mantiene bajo supervisión constante. Durante esta fase, se garantiza lo siguiente:

  • actualizaciones periódicas de bases de datos y funciones,
  • controles de fiabilidad ética, para garantizar que las respuestas sean siempre correctas, respetuosas y transparentes,
  • correcciones específicas basadas en los comentarios recopilados de clientes y usuarios,
  • Ajustes tecnológicos a nuevas versiones de modelos de IA y estándares de seguridad.

La supervisión ética es el sello distintivo de AION: lo que hace de Charlie no solo una herramienta tecnológica, sino un asistente digital confiable y certificado, siempre alineado con los valores del cliente y nuestro Código.

Preguntas frecuentes - Laboratorio Técnico y de Investigación

1. ¿Para qué sirve el Laboratorio Técnico y de Investigación? Es donde se diseña, capacita, prueba y certifica cada Charlie. Aquí, transformamos la tecnología en una herramienta operativa confiable y ética.


2. ¿Cuánto dura la fase de laboratorio antes de la entrega al cliente? En promedio, de 2 a 4 semanas, dependiendo de la complejidad del sector y del nivel de personalización requerido.


3. ¿Puede el cliente supervisar las fases de desarrollo? Sí. Ofrecemos actualizaciones periódicas y, al finalizar, un panel de control confidencial donde el cliente puede revisar conversaciones, estadísticas y resultados. 4. ¿Qué diferencia a su laboratorio de otros proveedores de chatbots? La integración de un protocolo ético certificado: cada Charlie es supervisado para garantizar respuestas respetuosas, transparentes, seguras y funcionales.


5. ¿Se mantienen actualizados los chatbots? Sí. Tras la instalación, Charlie permanece conectado al laboratorio para recibir actualizaciones continuas, correcciones específicas y mejoras periódicas.


6. ¿Es posible personalizar el nivel de control del cliente? Por supuesto. Cada cliente tiene acceso a las estadísticas y la verificación, pero la supervisión ética está a cargo de nuestro equipo para garantizar una fiabilidad constante.


7. ¿Con qué fuentes se capacita a Charlie? Charlie puede capacitarse con sitios web, documentos, preguntas frecuentes de la empresa y textos específicos. Cada fuente se valida para garantizar la coherencia y la calidad de las respuestas.


8. ¿Se garantiza el cumplimiento del RGPD y la privacidad? Por supuesto. Cada chatbot se desarrolla de conformidad con la normativa vigente (RGPD), con gestión segura de datos y la opción de anonimización cuando corresponda.


9. ¿Se puede integrar Charlie con los sistemas empresariales existentes? Sí. Charlie se integra con CRM, comercio electrónico, software de gestión y plataformas de terceros, así como con canales como WhatsApp, Facebook Messenger e Instagram Direct.


10. ¿Puede el cliente editar directamente el contenido de Charlie? Ofrecemos tres niveles de acceso:

  • Lector: lea solo las estadísticas,
  • Editor: capacidad de actualizar y corregir respuestas,
  • Administrador: Control total (no recomendado por razones éticas y de seguridad).



11. ¿Cómo funciona la supervisión ética? Nuestro equipo supervisa constantemente cada chatbot: verificamos el lenguaje, la transparencia y la precisión de las respuestas, y aplicamos actualizaciones y correcciones cuando es necesario.